Los panes de harina de las distintas harínas de maíz y mandioca que reciben distintos nombres en toda la geografía americana, aqui en el Paraguay en los últimos siglos sobrevive con el nombre de Chipa y Mbeju y es uno de los alimentos más antiguos que tiene la población americana. Mucho de los nombres se perdieron en el tiempo.
Con la venida de los españoles este pan adquiere una simbiosis con el cual se consolida la Chipa que actualmente conocemos. Así se introducen la utilización de los huevos, leche y queso en la alimentación y para la elaboración de la chipa, que paulatinamente la población mestiza o nativa va absorviendo.
En los registros históricos de la época de la colonia y de los jesuitas aparece en varios párrafos que los guaraníes preparaban tortas y panes de mandioca o de maíz, pero no especifican que tipo. Lastimosamente no se registraron los nombres que los guaraníes daban a estos panes o tortas ni los ingredientes.
Para la fabricación de la chipa no se usa ningún tipo de levadura y puede guardarse varios días, a pesar del calor. Estas características le valieron para que los sacerdotes, en los albores de la catequización lo admiten para que los indígenas lo utilicen durante la Semana Santa y todas las celebraciones religiosas.
Es una comida festiva y se la encuentra en todas las manifestaciones de la religiosidad popular, como: alimento principal de Semana Santa, o en los rezos finales de las novenas, el día de los muertos, el tres de mayo o día de la Cruz con el cual se realiza el Kurusu jegua y se colgaban en los pesebres.
Antiguamente y en la zona rural aún elaboran todos los ingredientes. Esta actividad involucra a toda la familia, hombres, mujeres y niños, así como en la preparación de la masa, los panes y la cocción. Actualmente la mayoría de las familias adquieren los ingredientes en el comercio local.
Fuente: Libro “El Pan sagrado”.